En México abundan los restaurantes chinos baratos, como en muchas partes del mundo. Más escasos son aquellos que ofrecen un marco elegante y sofisticado, pero encontrar uno con buena comida de esa nación asiática está literalmente en chino.
Un establecimiento de lujo con esta oferta culinaria es el Zhen Shanghai, al interior del Hotel Presidente Intercontinental. Ahí fuimos y de lo que cenamos nos quedamos sólo con tres cosas. La Pasta al vapor rellena de camarones ($185) fue la primera. Eran unos dumplings deliciosos, visualmente perfectos, de textura maravillosa y sabor sutil. Nos emocionamos mucho, porque fue lo primero que probamos y pensamos que toda la cena iba a ser así. Pero no lo fue.
Seguimos con un Tomate estofado relleno de camarón y abulón ($350). Se trataba de un jitomate gigantesco relleno de los citados mariscos y caldo. La apariencia era buena, pero el sabor decepcionante. Todo lo que tenía de gigantesco en tomate lo tenían de insípido el relleno.
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