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Fuimos a cenar al restaurante Ancora, que abrió hace pocas semanas en la zona llamada del “mercado” en Polanco. Un restaurante del grupo D’Amico que tal vez por ser el más reciente es atendido por los dueños, padre e hijo, y tiene un capitán italiano. Lo mejor de la noche, además de la atención del capitán y los dueños, fue el Pollo a la Valentina ($185).
Era una pechuga de pollo con salsa de jitomate deshidratado, champiñón, ajo y que como casi todo en la carta venía anunciado con un toque de picante que no se sentía. Estaba un tanto grasosa pero, eso sí, sabrosa y perfectamente cocida, en su punto exacto para conservar su jugo y todos sus sabores.
Una mención especial merece el pan, que era hecho en casa y estaba muy sabroso. Probamos la focaccia con jitomate deshidratado, un pan integral con aceitunas y semolina y otro integral con alcaravea, así como pan blanco.
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Además de la vista y la sensación de estar suspendidos en el aire, lo que más nos gustó de la comida organizada por Dinner in The Sky México fue el plato principal, que consistió en callo de hacha acompañado de risotto con hongos.
Los callos de hacha estaban muy bien cocinados y a una temperatura perfecta; los acompañaba un risotto de hongos que tenía un muy buen sabor, pero estaba ligeramente sobre cocido.
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Un domingo de esos en que de repente sale el sol y de pronto llueve y al rato vuelve a despejar, fuimos a comer a L'Arlequin Bistrot, ubicado en una de las mejores esquinas de Polanco. Para ese tiempo desapacible encontramos un menú sencillo y rico en carbohidratos en el que nuestro favorito fue el Croque-Monsieur con papas a la francesa ($65).
El Croque-Monsieur, que pedimos para compartir, es un plato de comida rápida inventado por el ingenio culinario francés en la prisa del sigo XX. Consiste en un sándwich de jamón bañado en salsa bechamel y cubierto de queso gratinado. El resultado depende de la calidad de los ingredientes y la preparación. Y este estaba muy sabroso. Grasoso, eso sí, igual que las papas.
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